Comenzamos una semana más... ¿Qué tal el finde?
El mío bastante tranquilo, una cena casera con los amigos y muchas risas.
Ya nos encontramos en tiempo de hacer el a veces "temido cambio de ropa" en nuestros armarios. Yo ya he hecho el mío, ha sido un proceso que he llevado con tranquilidad porque me gusta tenerlo bien organizado pero que he disfrutado muchísimo.

Para la hora de realizar el cambio he seguido los pasos que mencioné en su día en las entradas Organiza tu armario parte I y parte II. Así que os invito a que le echéis un vistazo a esas dos entradas para más información.

Mi armario tiene forma de L. A continuación veréis una foto de la parte que tiene doble puerta y que es donde va prácticamente todo. Cuenta con una barra colgador, tres cajones y un estante que separa la parte inferior que utilizo para guardar el calzado.


En la barra la ropa va colgada siguiendo este orden de categorías: vestidos, shorts/faldas, pantalones, partes de arriba y cardigans; todo ordenado según el código de color.
Sobre los tres cajones tengo una bolsa muy mona en color morado (haciendo juego con mi habitación) donde guardo perchas sobrantes para tenerlas a mano en caso de necesitarlas; y un organizador de cinturones.


Y justo detrás tengo un pequeño organizador con los bolsos de mano, que suelo utilizar con menos frecuencia o cuando salgo de noche los fines de semana.


Pasamos ahora a los cajones.
El primero de ellos contiene camisetas de todos los tipos; por un lado las básicas en color blanco y negro, justo detrás a la izquierda las camisetas de tirantes y a la derecha las camisetas casual en general. Justo en el fondo tengo guardados los leggins.


Las camisetas de tirantes las doblo de manera que parecen cuadrados y ocupan poco espacio.


En los dos siguientes cajones van los pañuelos/pashminas y bufandas.



A la izquierda del armario sobre la balda coloco los jerseys y chaquetas básicas de punto, distribuidos en cuatro montones y a su vez organizados por color y tono.


Justo debajo está el primer espacio dedicado al calzado. Todo guardado en cajas menos los tres pares que veis justo delante que ya que son los más de vestir y bonitos por sus colores funcionan a su vez como elemento decorativo.


Ahora pasamos al otro armario, que es de una puerta solo y por lo tanto más estrecho. En él guardo todas las blazers, cazadoras y ropa de abrigo y en la parte inferior tengo más espacio para el calzado, organizado nuevamente en cajas con dos pares bonitos a la vista.

Y esto es todo en cuanto al armario. En otra entrada me centraré en como organizo el resto de accesorios y cómo los utilizo como elemento decorativo en mi habitación.
Os deseo una feliz semana a todos.